Pronunciamiento: Condenamos el ensañamiento desatado contra Los Apus, Quinto Inuma y Manuel Inuma, defensores ambientales de San Martín.

Los Apus, autoridades elegidas por su comunidad, Quinto Inuma y Manuel Inuma tuvieron que huir de su territorio, junto a sus familias como consecuencia de atentados, secuestros y agresiones físicas contínuas, cometidas por mafias vinculadas a la tala illegal y al narcotráfico.  Estuvieron refugiados en Tarapoto, donde recibieron  protección policial desde el 24 de julio del 2021.

Ahora, tras retornar a su territorio ancestral, Santa Rosillo de Yanayacu en el departamento de San Martín, solicitan al presidente Pedro Castillo que las autoridades competentes actúen, y que los destructores de sus bosques, aliados hoy con autoridades del gobierno local, sean    castigados, ya que  la devastación de la naturaleza se ha intensificado en su territorio. 

Madera Sucia: El tráfico de madera es equivalente a la  versión forestal del narcotráfico, salvo por un hecho: funciona con documentos legales.  El 90% de la madera  extraída de los bosques peruanos tiene procedencia ilegal según el  informe de la La Máquina Lavadora, publicado en 2012 por la Agencia de Investigación Ambiental (EIA).

Entonces mientras alguien en alguna parte del mundo pide o compra muebles de caoba, cedro u otras especies amazónicas, el cuerpo de varios nativos flotan río abajo con multiples balas en el cuerpo; o niñas y mujeres indígenas viven en condiciones de casi esclavitud en los campamentos madereros.

A diferencia del dinero del narcotráfico, la industria de la madera ilegal es más difícil de evidenciar porque parece inofensiva. Mientras la cocaína mata, la madera de la Amazonía adorna la sala de una casa, de un palacio, en forma de una mesa, escritorio o pieza de arte. Y ambos delitos ambientales, tala illegal y narcotráfico, están conectados en sus cargamentos y traslado.

Archivar una denuncia es indolencia y complicidad pura de las autoridades asignadas, es taparse lo oídos frente a un grito de auxilio de ciudadanos y ciudadanas, defensores ambientales, quienes  no solo son seres humanos defendiendo el patrimonio natural de todos los peruanos; sino que son son la propia naturaleza defendiendo la naturaleza.

Recordemos el caso de Edwin Chota, quien denunció durante más de 12 años, y murió asesinado por madereros ilegales, frente a la apatía e indiferencia de las autoridades, que conocían los hechos, pero no actuaron cuando debían hacerlo.  

El Apu Quinto Inuma había denunciado, ya antes, a Jorge Segundo Ramirez Mandruma y Julio Barbaran Ojanama, quienes tienen un registro delictivo ante la Policia Nacional del Perú, por agresiones a los líderes indígenas y a la comunidad de Santa Rosillo de Yanayacu.  

Los denunciados, coludidos con autoridades del gobierno local, estarían ahora insertando  rondas campesinas externas, traídas de otras regiones para quitarle autoridad territorial a los líderes  indígenas locales.  Entre ellos se encontrarían involucrados:  Dedicación Vera Pardo y Manuela Saboya; esta última, implicada en el secuestro del Apu Manuel Inuma, según la declaración de su hermano Quinto Inuma.

El Fondo Socioambiental del Perú, condena estas agresiones reiteradas contra los defensores ambientales: Apu Quinto Inuma, Manuel Inuma, y miembros de la comunidad Santa Rosillo de Yanayacu de Huimbayoc, departamento de San Martín; y exigimos las operaciones para la detención  y captura de los presuntos delincuentes ambientales.

LO QUE DEBES SABER:

  • El Fondo Socioambiental del Perú, apoyó a Implementar  con equipamiento al Comité de Vigilancia y Monitoreo Comunal de Santa Rosillo de Yanayacu en el departamento de San Martín (2021)
  • Brindó cursos virtuales de aproximadamente un mes para defensores ambientales, en asesoría legal y estrategías de defensa legal de sus territorios. Fondo Socioambiental del Perú (2021)
  • Apoyó la reactivación y capacitaciones a líderes y miembros de la Comunidad Kakataibo en Ucayali, para conocer sus competencias y funciones como Comité de Vigilancia y Patrullaje comunal Forestal.

Lima, 12 de abril de 2022